Desde mi chevy rojo

La vida en un chevy rojo va de prisa, pero siempre despacio. Voy tomando periférico desde camino real. Todo corre poco pero me la suda: no hay nada como el olor a gasolina cuando el motor se fuerza y se esfuerza.

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Si cada cabeza es un mundo, cada motor una galaxia y cada coche una historia diferente. Un par de kilómetros después le subo a los No! y sus Borregos Kamikazes que suenan a través de mis bocinas rotas y me inspiran a volar. Acto seguido bajo el cristal y ahogo el acelerador.

Los problemas viajan en Sedán y minivan. No, mi Chevy rojo no corre como deportivo, pero se sabe defender. Mis lentes obscuros aparecen junto al resplandor del sol y el ‘perí’ se vuelve portador de accidentes. Uno a uno los vochos y las Voyager 2004 familiares se van quedando atrás.

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Como cualquier rebelde, termina por caer. Adiós a las minivans y los camiones de carga, llegó la hora de pelear. Los Kas, Los Golfs, los Derbys y hasta jettas y Boras van luchando en el camino pero siempre terminan por ver el tatuaje en la nalga izquierda de mi chevy: Un toro mamado que los mira retador, triunfante y orgulloso cuando en el retrovisor se asoma un Porche y me toca sudar y luchar. El toro siempre termina por esconderse y me toca ver otras calcomanías que se burlan de mi pequeño chevy rojo.

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Todo cabe en un Chevy rojo sabiéndolo acomodar. El chevy rojo es de aquellos desordenados que tienen todo tirado. Arreglar su maletero es casi tan difícil como dar una vuelta en la esquina sin frenar. Toda una vida viaja en los asientos traseros del automóvil rojo que se mueve ahora por la ciudad de la esperanza.

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Despacio, que llevamos prisa. Mi chevy rojo es descarado. Se le pone al tiro a cualquiera en plena hora pico. Se mete por aquí y por allá, acelera cuando ve el amarillo y no se deja de ningún ‘grandote’. Si, mi chevy rojo es un cabrón. Pero se sabe comportar cuando el riesgo es mayor. Despacio, que llevamos prisa y si queremos llegar.

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Compacto, flaquito y bonito. ¡Qué sexy es el chevy! No es muy tosco, cabe perfectamente en todos lados, se estaciona de lo más bello. No come casi nada: Cargar gasolina no es una actividad que uno frecuente mucho (aunque si cada vez más) desde el asiento de mi chevy rojo y sus curvas aéreas son encantadoras, pero sabe mostrar la trompa bien. Que belleza de automóvil.

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La vida es una carretera. Llego la hora de dormir, el coche cierra las luces o apaga sus ojos y después el motor logra descansar. No hay más camino y me quito el cinturón, apago la música y bajo del carro que otra vez quedo mal estacionado, pero se ve precioso. Nos vemos la próxima y cierro la puerta. Me meto a la casa no sin antes escucharlo decir hasta luego. ‘Beep Beep’.

Borrego,

El próximo sábado 21 de mayo.

Dicen que lo único malo de ser niños, es el hecho de que se está condenado a ser adulto.

De ser adulto no puedo hablar, no tengo manera de hacerlo pues aún no conozco ese mundo lleno de estrés, aburrimiento, números y esclavismo. Del otro si puedo hablar porque lo conozco a la perfección: la Niñez.

El próximo sábado 21 de mayo, dejaré de habitar este mundo infantil que tantas aventuras me dio, para voltear hacia aquel otro, el de traje y corbata. El próximo sábado 21 de mayo diré adiós a mi infancia, dejaré de ser un niño y le diré hola a mi nueva vida, convirtiéndome en adulto.

Si, es posible que esté exagerando el tema y realmente sea que el próximo sábado 21 de mayo solo cumpliré un año más. Tal vez es que sólo tengo miedo.

Miedo a dejar de imaginar. A dejar de ser alegre. Miedo a no poder ver caricaturas los domingos por la mañana. Miedo a olvidar a Monchito y su carrito. Olvidar el la importancia del sombrero de Woody y lo peligroso que era cuando Buzz abría su casco. Olvidar que es lo bello de patear una pelota de fútbol. Olvidar la inocencia. Olvidar las lágrimas que derramé cuando Pikachu abandonaba a Ash. Olvidar a Tom y Jerry. Olvidar mis tardes en el Azteca de la mano de mi padre. Tal vez sea miedo a olvidar mi infancia poquito a poco.

El próximo sábado 21 de mayo morirá Carlitos para dar paso a Carlos.

Carlitos,

¡El post número 100 de Un Borrego Sin Manada no podía ser más especial para un niño!

Soledad.

Qué triste eres Soledad.

Qué triste eres porque no te quiero y no te vas.

Porque te odio y aquí estas como cada noche.

Porque es tu presencia la que me obliga a extrañar.

Porque no es la sonrisa de un ángel, es tu hedor.

Porque es tu sentir el que me hace sufrir.

Porque no eres ella, ni eres tú.

Porque no me dejas ser yo.

Porque bañas en sangre mi pasión.

Porque escupes en mi orgullo.

¡Que triste eres Soledad, porque no te vas!

Porque cambié sus sueños por tu pesadilla.

Porque dejé su felicidad para crear mi agonía.

Porque no te pedí que vinieras cuando se fuera.

Porque no cerró la puerta y entraste tú.

Porque te odio, maldito demonio.

Porque te odio, maldito extraño.

¡Porque te odio Soledad!

Porque te odio, amor…

Borrego,

Ciudad Soledad

Pequeña, modesta y olvidada se encuentra Soledad en la cima de la montaña más chica de la nación. En Soledad no existen grandes héroes ni leyendas locales y si las hay se han ido perdiendo con el paso del tiempo porque en Soledad todo se olvida.

Los pocos habitantes, quienes por cierto no se conocen, pasan sus días creándose una identidad porque han olvidado la suya y la anterior a esa. Una vez satisfechos se van a la cama y al despertar no recuerdan dónde viven, a que se dedican e incluso llegan a olvidar sus propios nombres. Los grandes edificios nunca fueron terminados pues la obra nunca era recordada por los obreros pues a la mañana siguiente no recordaban nada.

Los grandes equipos deportivos nunca compitieron porque después del primer día, nadie regresaba a entrenar. Los grandes negocios quebraron pues después de la inauguración, olvidaban volver a abrir. Los periódicos no publicaban pues los reporteros no acudían a las noticias que nunca había.

Así, cada mañana que pasa en Ciudad Soledad, los habitantes respiran nostalgia. Nostalgia de grandes historias que contar, de anécdotas que recordar, de amores que disfrutar, de festejos y de aquellos días de gloría que nunca tendrán...

Borrego,

Él porque, no lo sé. Pero aquí estoy...

Pensé mil veces en un verso bello y acorde para retomar la actividad en mi pequeño espacio dentro del tremendo mundo de la red virtual. Pensé mil maneras, mil canciones, mil formas, mil videos, mil ideas y ninguna me llenó.

Es quizá el hecho de que no mucha gente se dé el tiempo de leer que es lo que ocurre en la vida de este pequeño ser que invade la tierra. Pensé en darle un giro, en cambiarle la idea, el template, la letra y hasta el nombre pero ninguna me llenó.

Es por eso que decidí tomar ‘Un Borrego Sin Manada’ como blog de notas personales abiertas a todo aquel ente (humano o no) que tenga interés en leerlo. Será entonces mi blog de recopilaciones personales, mismas como ideas, mis poesías (o intentos de poesía), mis aventuras, mis viajes, pensamientos y símiles que merecen algo más personal que un estatus en ‘Facebook’ o un ‘tweet’ con el pajarito.

Es para mi entonces, un verdadero orgullo presentarme la casa del Borrego. Hecha, naturalmente, por mi y para mi. Si tú, estimado amigo, estás interesado en leer mis pocas o muchas letras, eres más que bienvenido.

Comenzamos…

de copas y epitafios

Bebe un sorbo más.
Y de pronto grita y grita como si alguien pudiera escuchar.
La Soledad, la soledad y su frío y obscuro manto.
La soledad y el coraje, que envuelven al alma

Bebe un poco más.
Y de pronto calla, calla aún más de lo que ha callado en vida.
El misterio de su silencio expresivo, de su pausa dictadora.
Y es de pronto, ese silencio irónico el que lo hace callar una vez más.

Bebe otro trago más.
Y de pronto raya la pared, creyendo que alguien podrá entender.
Y podrán verlo, podrán incluso estudiarlo, pero nunca entenderán,
Por que los sentimientos no se entienden, ni se estudian, solo se expresan.

Bebe una copa más.
Y bebe y se destruye y bebe y se embriaga de pasión, de dolor,
De arrepentimiento y de alcohol y desesperado vuelve a beber,
mientras rueda su mejilla una pequeña gota de lluvia,
Lluvia olor a esperanza que sin embargo no llega, que se consume.

Bebe, para no volver a beber.
Un último sorbo, un último intento de salvar lo que sabe insalvable.
Encontró la solución a su vida, a su insalvable vida.
De pronto y sin más jalo del gatillo y la copa cayó.

hoy voy a enviar una carta...

Hace mucho que no te dedicaba mi tiempo, mucho menos mis pensamientos más profundos.

Y es que, pare serte sincero, últimamente han pasado demasiadas cosas que han tenido mi mente ocupado.

Tiene como un mes, días más días menos, que no platicábamos, y es que volví a la escuela a “estudiar”.  Conocí gente nueva, casi todos mis profesores son nuevos, creo que del semestre pasado repetirán 2 cuando mucho. Hice nuevos amigos también, pero lo importante es que la mayoría de los viejos amigos sigue ahí.

¿Te acuerdas de Calixto? El domingo se irá a España a representar al estado (y al país) en la Copa del Rey. Estamos esperando muy ansiosos a que regrese con la copa.

¿Te acuerdas de Karlita? Ella sigue estando tan preciosa como siempre, últimamente se las ha visto muy difíciles y me ha tocado sufrir con ella, pero no hay mal que por bien no venga.

¿Te acuerdas de jaque? Ayer dejo de ser una niña, ya tiene 18 añotes, no andaba muy contenta porque dice que extrañará su niñez.

¿Te acuerdas de Mojarra? El wey se fue a Monterrey, se muy poco de el, la verdad lo extraño muchísimo. Solo sé que le va bien en el Norte.

¿Te acuerdas de Jime? Con ella las cosas no cambian mucho, sigue pareciendo que me odia, aunque en el fondo yo sé que me odia… siempre trata de maquillarlo. La verdad es que la quiero mucho.

¿Te acuerdas de Mayra? Ella se regreso a la Ciudad de la esperanza, de eso ya te había platicado, la verdad es que me hace mucha falta, aquí en Puebla nadie comprende mis pensamientos, solo tu y ella. Y tu porque no te queda de otra.

¿Te acuerdas de Lulú? Yo no sé, pero cada día me enamoro más de su sonrisa, la semana pasada cumplimos 10 meses. Tiene un problema con los “Chales” , te acuerdas que desde chiquito, toda la vida he dicho “Chale”? pues ahora todo mundo dice Chale y eso le molesta, en fin, ya la conoces, sus delirios.

Seguramente te has de acordar de mucha gente que es importante en mi vida, pero la verdad es que no tengo mucho tiempo, luego platicamos de ellos. Pronto te presentaré a otras personas que han entrado a mi vida.

Ahh, terminé mi libro “Los hombres que no amaban a las mujeres” y acabo de comenzar la segunda parte: “la chica que soñaba con un fosforo y un galón de gasolina” después te platico de ellos.

Ya viene el Interlinces, será del 6 al 10 de Octubre y me he esforzado muchísimo para ir. Espero de verdad, poder ganarme un lugar en el equipo.  En cuanto sepa si voy o no, vengo a platicarte ¿va?

Que mal amigo soy, ya ni siquiera te he cambiado la canción, discúlpame, ya te pondré más atención. Lo que pasa es que mi lap se volvió a descomponer y no he podido entrar mucho al internet.  Espero pronto solucionar eso, ya extrañaba desahogarme contigo.

Te has de acordar de mi fanatismo enfermedad por Necaxa, pues hace poco viaje a la ciudad de la esperanza a verlo contra el América en el estadio Azteca. Fui con Taker  ¿te acuerdas de el?. A pesar de que el resultado no fue el mejor, me la pase muy chido y compre mi nueva playera del Necaxa, ya tengo 11 (¿o 12?). Me subí al metro y nos encontramos con la monumental miniporra del América. La verdad, podría decirte que soy muy macho y uyuyuy… si sudé.  

Lamentablemente y aun cuando tuvimos la oportunidad, no ganamos... tampoco perdimos. 

Después del partido fuimos a comernos unos tacos taquear y a beber cerveza chelear a General Anaya.

Sigo trabajando en la palería, ya llevo más de dos años aquí y aun hay cosas que no logro comprender de esto, pero bueno, la practica hace al maestro.  

Hablando de maestros, mañana tengo escuela y aun me falta tarea, después nos vemos y te sigo contando que es de mi vida.

Borrego, 

*She Loves That Music!*

Hey!

El dia de ayer primero de Agosto quedo formalmente inaugurado "*She Loves That Music!*" el nuevo blog referente a la musica que movio al mundo.

Te invitamos a hacernos cobija y visitar este sitio que traerá mucha, mucha, pero mucha musica, desde Led Zeppelin hasta los Beatles.

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Hoy comienza una nueva aventura musical.

Hoy, 7 de agosto de 2010, Nefer, Nino y un servidor Borrego, damos inicio a este nuevo blog, donde hablaremos de la música que ha movido al mundo.

Pasearemos por los rincones mas profundos de Jamaica para escuchar a Marley & the wailers tocando su reggae y cambiando la historia de la musica urbana, caminaremos en Abbey Road junto a los Beatles, veremos crecer un muro, tabique a tabique junto a pink Floyd.

Volveremos a los 70`s a ver el incio del Punk junto a Sid Vicius y los Sex pistols. Veremos rodar las piedras junto a Mick Jagger y compañia, subiremos por una escalera al cielo, para luego viajar por una carretera al infierno. Seremos titiriteros, Nos burlaermos de la ley mientras huela a un espiritu adolescente...aunque sea un desodorante de mujer.

Disfrutaremos una a una las bandas, canciones, eventos y musicos que cambiaron y movieron al mundo y daremos la bienvenida a la nueva ola del Rock N Roll. ¿porque? porque ella ama esa musica.

¿¡Are you ready to Rock!?

Fuente:www.shelovesthatmusic.blogspot.com
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Alla Nos vemos!

El malasuerte 2.0

El malasuerte 2.0

Porque cada mala historia, tiene una segunda parte…

No habian transcurrido ni 48 horas desde mi insidente llantero cuando ocurrio mi segunda leve desgracia autogomilistica.

Hoy fui con mis cuates Koke y Abelardo al cine en Angelopopis (Cabe mencionar que odio esa plaza y si fuimos ahí fue por culpa de abelardo).

Pase por ellos a casa de Abelardo y de ahí nos fuimos a la plaza, de mas esta decir que el estereo seguia sin funcionar. Llegamos a la plaza y caminamos un rato baboseando y viendo las cosas que economicamente (y aun con el 40% de descuento) estan imposibles de comprar.

De ahí fuimos al cine, a ver Salt, la pelicula estuvo chida y la Jolie mmmm es la Jolie. Salmos, seguimos baboseando y cotorreandonos al koke y de pronto ya estabamos en el estacionamiento cuando recorde que habia que regresar a pagar el boleto.

Koke y yo regresamos a la plaza a pagar el boleto y antés de llegar comente en tono de broma “¿te imaginas si perdiera el boleto?” después de un “Si, no manches” reimos tantito, saco el dinero y…si, habia perdido mi boleto.

Volvimos al carro con la esperanza de haberlo dejado olvidado, pero no aparecio. Tuvimos muchas ideas de cómo conseguir un boleto nuevo pero todas fracasaron. Cuando por fin nos dimos por vencidos, le preguntamos a un policia el procedimiento para recuperar el boleto.

Nos indico que habia que ir a atención a clientes (el cual se encontraba totalmente al otro lado de la plaza mas grande del estado) y llevar llaves, tarjeta de circulación y una identificación oficial vigente junto con los 80 pesitos de la reposición, mismos que apenás juntamos.

Click para agrandar.

Total, caminamos toda la plaza cuando Abelardo pregunto “¿si tienes identificación oficial vigente?” le dije que si, que el permiso y saque mi tarejetita y cheque fecha de vencimiento: 5 de agosto de 2010. “No mames…se vencio ayer.”

En definitiva, tengo mala suerte.

Estabamos Jodidos, palabras de Abelardo. Total, fuimos con la tarjeta de circulación y mi permiso vencido a veeeeer si podiamos pagar con eso y largarnos de una buena vez de ahí. Volteo a ver mi reloj: 2:40.

“Chin, mi mamá me dijo que fuera por ella 2:30 no jueges…”

En eso sono mi telefono, era mi mamá que de mas esta decir, ahora si, me regaño gacho. Entramos a un lugar re feo y obscuro dentro de la plaza donde en una ventanilla super escondida una señora me recibió mis papeles, me entrego un vale pagamos, saco unas copias y nos largamos de ahí, afortunadamente no checo la fecha de vencimiento de mi permiso y no tuvimos problema. Recorrimos la plaza de regreso al coche y buscamos la salida de “provedores y pencionados” y nos fuimos de la plaza.

Fui a dejarlos y llegue a mi casa 3:30pm, una hora y media mas tarde de lo acordado.

El malasuerte

Definitivo, tengo mala suerte.

Hoy lleve a mi mamá en la papeleria. Como de costumbre, mi mamá iba con sus clasicos “cuidado” y “esta el alto” o “aguas con el agujero” o “despacio” y un largo etc. Hoy como siempre, tuvimos una leve discución sobre el tema y le mencione que en casi dos años de manejar, nunca me habia pasado nada.

Llegamos a la papeleria y me encargo que llevara unas cosas a otra papeleria. Pues bien, ahí voy yo con el celular conectado al estereo del coche y cantando a todo volumén. Me estacione, baje del auto volteo a ver el carro y pense “que bien me estacione hoy…”

Deje lo que tenia que dejar y me retire con una amable sonrisa en el rostro. Me subo al auto ford fiesta 2008 (que mamón), arranco el motor y el pinche estereo ya no funcionaba…otra vez. Logicamente yo ya iba mentando madres a disestra y siniestra y decidi tomar otra ruta distinta a la acostumbrada.

Derrepente, en una curva volteo a ver si no vienen carros, acelero y ¡TAZ!.

Pege un brinco estilo “pajarito” en la plaza México en enero del 2006. Lo primero que escuché fue un constante “shh-shh-shh” y lo primero que se me vino a la cabeza fue “Puta madre! La llanta!” me orille (a la orilla) y frene en seco asustando a una niña que pasaba por ahí.

Lo que sucedió fue que no vi un pequeño agujero que hay en la calle (llamado bache) y por la velocidad y la minimidad del bujéro, le hizo un pequeño orificio a mi llanta.

Baje del coche encanojadisimo a revisar la llanta, efectivamente… la ponché. En un principio pense que habia reventado dos, pero no. Solo fue la delantera derecha.

Lo primero que hice fue mentar madres a disestra, siniestra y reversa… luego llame a mi madre quien salio corriendo de la papeleria para llevar el gato y poder cambiar la llanta.

Espere cosa de media hora cuando por fin se me ocurrio caminar media calle para comprar unas papas y después de un rato ya estaba mas enchilado por las papas que por el coraje que me dio ponchar la llanta. Como una hora después y bajo amenaza de lluvia, por fin cambiamos la llanta y nos fuimos de ahí…

Por cierto, las palabras de mi madre, a huevo tenian que ser: te lo dije.

 

 

Cambiando la llanta

el piquetito de la llanta

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el bujero en la calle que casi no se ve.

Borrego,